La verdad es que me siento muy identificado con las historias que aquí se cuentan. Mi problema no es la diarrea, mi problema es simplemente "cagar". Cuando me entran las ganas, tengo que echarlo, esté donde esté e inmediatamente. Además, existe mayor probabilidad de tener ganas si la situación es inoportuna.
Resumiendo, podría contar mil historias, que son una putada. Esta misma mañana iba por la calle y tuve que hacer una parada en casa de mis padres, que estaba más cerca que la mía, completamente desesperado a punto de cagarme encima.