Basada en la exitosa novela de Ignacio Martínez de Pisón, uno de los escritores más prestigiosos del panorama literario actual, El día de mañana es una serie sobre las aspiraciones, los deseos y el encaje en el mundo de una generación tan llena de idealismo y anhelo de utopía como de contradicciones, convencida de tener el futuro en sus manos.
No se trata de una historia convencional sobre la transición, ya que busca ofrecer al espectador una visión novedosa y sugerente de unos años irrepetibles de cambio y agitación, que sembraron la semilla de muchas ilusiones cumplidas y algunos sueños rotos.
La Barcelona de los 60 y 70 es un escenario ideal para abordar los temas y la atmósfera que nos interesa: una ciudad en plena ebullición cultural y económica que se convirtió en la puerta de entrada de todos los cambios que estaban por llegar. El día de mañana adquiere el ritmo y la tensión de un thriller y la profundidad psicológica del drama de personajes.
La trama está tejida en torno a la vida de Justo Gil (Oriol Pla), un misterioso personaje que dejó una profunda huella en todo el que se cruzó con él.
El día de mañana es una serie generacional, con vocación universal y profundamente humana, construida a partir de conflictos personales en torno a la amistad, la traición, el amor, el rechazo y la envidia. En ella, cada personaje tiene una historia que contar, dando forma a un fresco social heterogéneo y singular.
Mariano Barroso en la dirección y Alejandro Hernández en el guion, junto con un elenco de jóvenes actores como Oriol Pla, Aura Garrido y Jesús Carroza y otros consagrados como Karra Elejalde, Nora Navas, David Selvas, Pere Ponce, Pep Munné, Álex Casanovas (y un largo etcétera) y un equipo técnico de primer nivel, han conseguido crear un producto de alta calidad, capaz de satisfacer las demandas del espectador más exigente y al mismo tiempo entretener y enganchar a la audiencia.