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Re: Katsuhiro Otomo
El Anime de Akira de Otomo hay que reconocer que siempre me fue de difícil digestión... pero en esto del cine hay películas que no tienen valor por sí mismas sino por lo que han significado y por lo que significan a través de otras películas que se han hecho después influidas por estos tótems intocables. Eso sí, el manga del que parte el film es de lo más estimulante que he visto en mi vida... aunque visto a través del color que pusieron en la edición francesa (Glenat) que luego se publicó en España. Sin ese color para mí no sería lo mismo (es como decir que Amanecer de Murnau no me gustaría igual sin la banda sonora moderna que le han añadido, pero también es así).
Intuyo que la imaginería de Otomo desde entonces ha influido a varios animes. Lo intuyo tras haber visto hace unos días Paprika de Satoshi Kon que me ha recordado los collages que pueden verse en el Kaba de Otomo, un artbook sobre la obra publicitaria de Otomo,.... puse algunas imágenes de estos collages en este hilo. Parece como si estuvieramos ante un nuevo bestiario más adulto, urbano y onírico... conejos, robots, muñecas.
Lo que me ha extrañado ha sido no ver en Paprika demasiadas referencias tronadas al Japón medieval, como sí pude encontrar en la imaginería de Otomo.
Teniendo en cuenta que tengo cierta preferencia hacia lo recargado y excesivo, Paprika me ha encantado. Le he puesto una nota de 8.
Una de las principales diferencias a nivel gráfico de los mangas de Akira de Katsuhiro Otomo respecto al resto de mangas de los 80 era el especial cuidado que ponía Otomo en el grafismo. Ese detallismo y perfección era en realidad un rasgo típico del cómic europeo, concretamente una influencia del dibujante Moebius en la obra de Otomo, esa fue una de las razones del éxito de Akira en Europa. No es que el resto de mangakas dibujaran peor, simplemente lo hacían diferente, siguiendo otro tipo de exigencias: la preferencia de la historia por encima del grafismo, la exigencia de resolver gran número de páginas en poco tiempo y los diferentes gustos gráficos del público japonés. Sin embargo -y hasta ahora me parece increíble- Otomo y su equipo se las arreglaron para crear un manga de alta calidad gráfica y, a la vez, gran número de páginas. Para ser justos, seguramente había más dibujantes de manga con una gran exigencia gráfica, pero a lo mejor no estaban en ese momento en el centro del huracán... aunque fueron "descubiertos" posteriormente cuando empresarios europeos, americanos y japoneses rebuscaron desesperadamente entre sus stocks a los autores y obras niponas más occidentalizadas para introducirlas en el hervidero del mercado Occidental del cómic. Paradojicamente en realidad la perfección en el trazo gráfico era una rasgo tipicamente japonés, aunque del Arte japonés.. no del manga. La obra de Suehiro Maruo lo ponía en evidencia y permitió conectar el manga con los gustos europeos sin necesidad de desnaturalizar culturalmente al mangaka. Es como si Akira Kurosawa hubiera conseguido en el cine quitarse la etiqueta de occidentalizado usando como coartada la existencia de una vieja tradición cinematográfica nipona en la que se apoyara (esto me lo invento) en lugar de en la de Ford y similares. Así habría conseguido sacudirse de un plumazo el complejo de antiozu... pero no fue así.
Pero eso es cosa del pasado, hoy el mundo de los gustos comiqueros es más difícil de descifrar, hay más mestizaje,... el lector de cómics europeo acepta mejor grafismos simplificados y culebrones -tanto si vienen de Asia como de EEUU- y el mangaka de hoy tampoco ya es el de hace 20 años, una vez introducido el gusanillo de las posibilidades artísticas en el grafismo de un cómic es difícil que no haya algún mangaka que se deje seducir. Sin embargo era interesante nombrar cómo estaban los gustos del pasado para entender algunas cosas del presente porque.... ¿qué tiene que ver esto con el Anime? Muchísimo:
...probablemente tenga que ver gracias a Katsuhiro Otomo (y a algunas otras excepciones como Miyazaki, etc) porque pasaron de ser mangakas a directores de Animes, algo que -por lo que he visto en el imdb- no es tan frecuente (Akira Toriyama no hace animaciones, Masamune Shirow tampoco). Eran tiempos afortunados en Occidente para la aparición del Anime de Akira (1988) con sus especiales características. Se habían creado aquí, por entonces, raros experimentos comerciales en animación como El señor de los anillos (1978), Heavy Metal (1981) o Tigra: hielo y fuego (1983), cine underground de animación que ponía especial énfasis en la perfección gráfica y de los movimientos de los personajes (al menos ese era el intento). Era un aspecto que la industria de Disney ya había cuidado, pero esta vez venía de una inspiración adulta muy diferente, la de los cómics Underground. Estos experimentos comerciales eran auténticas artesanías que debieron gastar enormes cantidades de tiempo e ilusión de unos cuantos creadores, por ejemplo, Frank Frazetta, dibujante de cómics y gran ilustrador, que con toda esa tradición de perfección gráfica estuvo detrás de la creación de personajes del film de Tigra, también está el caso de Berni Wrightson y Richard Corben en el film Heavy Metal. Y es en este contexto, con un pequeño público de animación Underground comercial creado en pequeños circuitos, en que llega el anime de Akira y Otomo se las arregló para conseguir imponer su visión del producto en su Anime... y esa visión era muy del mundo del cómic, ..y muy Moebius-europea. De ahí que en Akira se perciba en cada fotograma ese intento de perfección gráfica y de movimientos que tan bien conectaba con esa corriente de animación Underground que ya existía en Occidente.
¿Y qué es lo que noto, muchos años después, al ver Paprika? Pues que a pesar de la pátina uniformizadora que graficamente el Anime suele aplicar a cualquier pieza de su puzzle venga de la inspiración que venga, es interesante notar cómo Satoshi Kon pone un especial cuidado gráfico -y en el sombreado, dando volumen- en las imágenes oníricas del film que son las más influidas por la imaginería de Katsuhiro Otomo y, sin embargo, baje el nivel gráfico del film en otras escenas más anodinas, no notándose entonces ese especial pulso que ponía Otomo en la perfección anatómica, el sombreado y el movimiento de sus personajes de Akira. Es entonces cuando graficamente la atonía del Anime tradicional entra en Paprika, los personajes pierden cuerpo, proporción y consistencia, los sombreados dejan de crear volúmenes y sirven para cubrir superficies planas.
..para ilustrar todas estas referencias cruzadas, un dibujo del Tetsuo de Akira pero realizado por Moebius.
Sin estas explicaciones es difícil que un chaval de 17 años de hoy pueda notar graficamente la diferencia entre Akira y otros animes, y cómo estas sutilezas, si uno se fija bien, pueden dar pistas de los virajes que ha dado el Anime y de hasta qué punto los directores de este cine han traicionado o respetado sus referentes. Estas sutilezas también dicen mucho de los gustos y tolerancias del espectador de Anime actual.
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