¡Cómo sois!
He dicho que eran las que menos me convencían, no que no me gustasen nada. Por supuesto tienen sus momentos, ...pero a Kubrick -con el tiempo que se tomaba entre peli y peli- se le exigía casi la perfección: una obra maestra con cada nuevo trabajo (y las dos últimas creo que quedan algo lejos de esa categoría, aun teniendo cosas estimables).