Tema: Las últimas pelis que has visto en casa

"La invitación" es una muy notable película, el cual me sorprendió, la vi sin saber nada, es de esas pelis que yo llamo del 50%, donde el film se basa en creerse o no la premisa propuesta. Me extrañó su calidad sabiendo que el director hizo la horrenda (es poco) "Jennifer's Body". En el segundo visionado, ya sin el factor sorpresa, también es disfrutable, y el BD luce fantásticamente bien.

Exacto. Hay películas que se disfrutan mucho más, dejándose llevar. Además, el hecho de que muchos de los actores no sean caras conocidas, la hace más creíble y más interesante, en mi opinión.

Iniciado por DrxStrangelove

A mi también me gustó mucho, tiene cosas fantásticas, aunque no comparto tu entusiasmo respecto al final. En el momento en que por fin se hace evidente...

Spoiler:

... las sospechas y la especulación psicótica del protagonista, se vuelve demasiado convencional y mi interés cae en picado.

Pero hasta ese punto es una maravilla muy bien dirigida.

Si, en ese sentido si.Un final que siguiese esa línea que comentas podría ser incluso mejor.Pero también durante toda la película se empatiza muy bien con el protagonista, y se desea realmente lo que ocurre.No sé si un final tan "amargo" le sentaría bien.Aunque como digo,bien hecho, podría ser mejor.

Iniciado por feliux

Si, en ese sentido si.Un final que siguiese esa línea que comentas podría ser incluso mejor.Pero también durante toda la película se empatiza muy bien con el protagonista, y se desea realmente lo que ocurre.No sé si un final tan "amargo" le sentaría bien.Aunque como digo,bien hecho, podría ser mejor.

Exacto, es un poco lo que me faltó en el final, que por suerte es el ultimo tramo de la película, quizàs los ultimos 15 minutos; pero desde luego, hasta ese momento, la manera de jugar con el espectador llevandoló de un lugar a otro está realmente bien, en mi opinión mucho más interesante y mejor conseguido que en "Déjame salir", donde se pretende hacer algo parecido durante gran parte de la trama, aunque eso sí, "La invitación" no tiene la misma fuerza en un segundo visionado a diferencia de la de Jordan Peele, que tiene una segunda lectura bastante interesante.

Iniciado por DrxStrangelove

¿Te fijaste en las comillas, no?

Iniciado por Alex Fletcher

...
Y sobre Sam Fuller, pues me acabo de anotar las pelis que me faltan en la libreta freak, por lo que veo "sólo" tengo 8 pelis suyas:

-Casa de bambú, la
-Casco de acero (The steel hemlet)
-Corredor sin retorno (shock corridor)
-Diablo de las aguas turbias, el (hell and high water)
-Kimono rojo, el
-Luz en el hampa, una (the Naked kiss)
-Manos peligrosas (Pickup on South Street)
-Uno rojo división de choque (the big Red one)

De las cuales he visto "uno rojo...." me encantó, y aún me encantó más "manos peligrosas" con un Richard Widmark a gran nivel, cine negro de alto nivel (vaya, creo que es cine noir, aunque no apostaría). Y "casco de acero", esta no me entusiasmó tanto. Evidentemente estoy dentro en la revisión de Fuller, eso si un poco a mediano y largo plazo, para ponerme en versión recolecta.

A esas añadiría como mínimo White Dog, tristísima película contra el racismo. Yo también me lo planteo a medio plazo porque en este caso me faltan bastantes por ver, y no tengo claro que sean fáciles de conseguir en DVD o BD.

Iniciado por mad dog earle

¿Te fijaste en las comillas, no?

Sí, claro que sí. si en realidad las utilizamos más para ubicar que para otra cosa...

Iniciado por mad dog earle

¿Te fijaste en las comillas, no?

Iniciado por DrxStrangelove

Sí, claro que sí. si en realidad las utilizamos más para ubicar que para otra cosa...

Cara de cuando no te has enterado bien del chiste, pero no hay más remedio...

Iniciado por tomaszapa

Cara de cuando no te has enterado bien del chiste, pero no hay más remedio...

Cuando digo: "... si en realidad las utilizamos más para ubicar que para otra cosa..." me estoy refieriendo a las etiquetas, si es que era eso lo que no cuadraba demasiado.

Iniciado por tomaszapa

Cara de cuando no te has enterado bien del chiste, pero no hay más remedio...

Uno no puede "entender" siempre, tomaszapa.

Iniciado por mad dog earle

Uno no puede "entender" siempre, tomaszapa.

Iniciado por mad dog earle

Uno no puede "entender" siempre, tomaszapa.

Jaja! di que no, tomaszapa! Seguro que la culpa ha sido mía por no haberme expresado bien, as usual

Bueno, poca broma con la siguiente película.

Ayer tuve ocasión de ver, no en casa sino en la Filmoteca, uno de los films más sorprendentes que he visto en mi vida, Tomorrow, the World!, de un director del que no había oído nunca hablar, Leslie Fenton. Se trata de un film de 1944, o sea en plena fase final de la II Guerra Mundial, encuadrable dentro del cine de propaganda que produjo Hollywood, aunque vista hoy en día más parece un esperpento de dudosa eficacia propagandística. Estamos ante la traslación a la pantalla de la obra teatral del mismo título de James Gow y Arnaud d’Usseau, estrenada con éxito (!!) en Broadway el año anterior.

El planteamiento propagandístico ya no gira alrededor de la necesidad de intervenir en la guerra, de despertar el ardor guerrero de los jóvenes norteamericanos ni de avivar conciencias por la pérdida de libertades en la Europa democrática, sino más bien en cómo actuar ante la que parecía inminente derrota alemana. El panorama futuro que se intuye es la de un país con millones de ciudadanos a los que el nazismo ha lavado el cerebro sirviéndose de las tópicas virtudes germanas (disciplina, orden, método) para moldear unos seres despiadados, fanáticos, capaces de servir hasta la muerte (la propia y la de los demás) al III Reich y al Führer. Y todo ello encarnado en la figura de un niño de casi 12 años, Emil Bruckner, huérfano de padre y madre (el padre murió se supone que asesinado por los nazis por sus convicciones democráticas, aunque el hijo dice que se suicidó cobardemente), que viaja desde Alemania a Estados Unidos (primer detalle sorprendente en plena guerra) para vivir con la familia de su madre, el tío Mike (un sobrio Fredric March) y la solterona tía Jessie (la siempre solvente Agnes Moorehead). El primer signo de que algo no funciona bien en la cabeza de Emil es que lo primero que hace el chico al llegar es presentarse vestido con el uniforme de las juventudes hitlerianas, brazalete con la esvástica incluido.



Su manera de pensar, que no duda en expresar en cualquier momento, es un muestrario de tópicos racistas y supremacistas (y tristemente verídicos) de la ideología nazi, pasando por el desprecio a los judíos (Leona, papel interpretado por Betty Field, es la novia judía de Mike, que es viudo, y además será la profesora de Emil), los eslavos (un muchacho vecino es de origen polaco) y las mujeres en general, a las que considera inferiores.



A pesar de ello, Emil demuestra grandes dotes para el mando y una enorme capacidad manipuladora. El drama se va acentuando día a día hasta la catarsis final que conllevará el evidente mensaje de que, a pesar de todo, hay que ayudar a esos infantilizados alemanes que se han dejado fanatizar a base de propaganda y violencia. La propuesta es tan exagerada, tan inverosímil, tan ridícula en muchos momentos, que uno acaba con la sensación, a pesar de algunos detalles interesantes (como una agresión a su prima Pat fuera de campo, o la persecución de Emil campo a través por parte de otros muchachos), de haber visto un film grotesco, y con la duda de qué sentía el público norteamericano en su día después de verla (ayer en la sala las caras eran de perplejidad y de no saber bien qué pensar de lo visto). Por descontado, el máximo protagonista de la función es Skip Homeier (en su debut), el joven actor que encarna a Emil con convicción, forzando un acento alemán de manera que casi escupe las palabras, y al que también dio vida en Broadway. A Homeier lo podemos localizar en films como El pistolero, de King; A bayoneta calada, de Fuller; Los diablos del Pacífico, de Fleischer; o Estación comanche, de Boetticher, y mucha televisión en los 50, 60 y 70. En resumen, una rareza, eso sí, obligada para interesados en el cine de propaganda hollywoodiense.

Pues sí. Al parecer el niño Skip Homeier, a la edad de 12 años, fue todo un acontecimiento durante 1943 (la Guerra estaba en marcha), en esta representación en Broadway. Más de 500 pases, lo que justifica que al llevarla al cine, lo hiciera tan bien. Y además, hacerlo frente a actores veteranos. El prototipo de child star.

Iniciado por tomaszapa

Pues sí. Al parecer el niño Skip Homeier, a la edad de 12 años, fue todo un acontecimiento durante 1943 (la Guerra estaba en marcha), en esta representación en Broadway. Más de 500 pases, lo que justifica que al llevarla al cine, lo hiciera tan bien. Y además, hacerlo frente a actores veteranos. El prototipo de child star.

El chaval se entrega a fondo, pero a mí me parece una interpretación demasiado exagerada, caricaturesca. Me parece mucho más natural la interpretación de Joan Carroll en el papel de su prima Pat. Compruebo, no obstante, que Joan solo intervino en un par de películas más, aunque una de ellas fue todo un exitazo: Las campanas de Santa María, de Leo McCarey, película que creo no haber visto, protagonizada por, para algunos, el mejor crooner de la historia, Bing Crosby (yo prefiero a Sinatra, incluso a Dean Martin), e Ingrid Bergman.

Iniciado por mad dog earle

El chaval se entrega a fondo, pero a mí me parece una interpretación demasiado exagerada, caricaturesca. Me parece mucho más natural la interpretación de Joan Carroll en el papel de su prima Pat. Compruebo, no obstante, que Joan solo intervino en un par de películas más, aunque una de ellas fue todo un exitazo: Las campanas de Santa María, de Leo McCarey, película que creo no haber visto, protagonizada por, para algunos, el mejor crooner de la historia, Bing Crosby (yo prefiero a Sinatra, incluso a Dean Martin), e Ingrid Bergman.

Las campanas de Santa María fue un exitazo en taquilla. Es la continuación en el éxito del año anterior de Bing Crosby (hablo de la multioscarizada Siguiendo mi camino), que estaba en el cenit de su carrera artística, tanto en el cine como en la canción.
Por cierto, hay una anécdota y es que andaba en la Gala de los Oscar de 1944, Bergman preocupada porque los intervinientes en su próximo proyecto (esta película que nos ocupa) habían ganado Oscar y ella aún esperaba (finalmente lo recibió por Luz que agoniza).
Y sí, yo que he seguido en los últimos años la carrera de todos estos artistas, digo objetivamente que Bing Crosby fue la mayor estrella musical de lso años 30 y 40.
Frank Sinatra lo tenía obviamente como un referente (igual que con Nat King Cole) e incluso los imitaba.
Frank siempre fue muy ambicioso y sabía que quería ser como Crosby, pues era el número 1.
A mi me gustan ambos, porque cada uno es de una época y canta de una forma adecuada a su tiempo. No me valen comparaciones injustas entre ellos.
De todas formas, mi gusto personal se decanta más por Sinatra, porque Sinatra es único, y sobre todo, el Sinatra maduro, ya alejado de cualquier mimetismo con el pasado, y ya con bastante sufrimiento y vivencias en la piel para dejar joyas como las de los 50 y 60 (sobre todo).

Iniciado por mad dog earle

Bueno, poca broma con la siguiente película.

Ayer tuve ocasión de ver, no en casa sino en la Filmoteca, uno de los films más sorprendentes que he visto en mi vida, Tomorrow, the World!, de un director del que no había oído nunca hablar, Leslie Fenton. Se trata de un film de 1944, o sea en plena fase final de la II Guerra Mundial, encuadrable dentro del cine de propaganda que produjo Hollywood, aunque vista hoy en día más parece un esperpento de dudosa eficacia propagandística. Estamos ante la traslación a la pantalla de la obra teatral del mismo título de James Gow y Arnaud d’Usseau, estrenada con éxito (!!) en Broadway el año anterior.

El planteamiento propagandístico ya no gira alrededor de la necesidad de intervenir en la guerra, de despertar el ardor guerrero de los jóvenes norteamericanos ni de avivar conciencias por la pérdida de libertades en la Europa democrática, sino más bien en cómo actuar ante la que parecía inminente derrota alemana. El panorama futuro que se intuye es la de un país con millones de ciudadanos a los que el nazismo ha lavado el cerebro sirviéndose de las tópicas virtudes germanas (disciplina, orden, método) para moldear unos seres despiadados, fanáticos, capaces de servir hasta la muerte (la propia y la de los demás) al III Reich y al Führer. Y todo ello encarnado en la figura de un niño de casi 12 años, Emil Bruckner, huérfano de padre y madre (el padre murió se supone que asesinado por los nazis por sus convicciones democráticas, aunque el hijo dice que se suicidó cobardemente), que viaja desde Alemania a Estados Unidos (primer detalle sorprendente en plena guerra) para vivir con la familia de su madre, el tío Mike (un sobrio Fredric March) y la solterona tía Jessie (la siempre solvente Agnes Moorehead). El primer signo de que algo no funciona bien en la cabeza de Emil es que lo primero que hace el chico al llegar es presentarse vestido con el uniforme de las juventudes hitlerianas, brazalete con la esvástica incluido.



Su manera de pensar, que no duda en expresar en cualquier momento, es un muestrario de tópicos racistas y supremacistas (y tristemente verídicos) de la ideología nazi, pasando por el desprecio a los judíos (Leona, papel interpretado por Betty Field, es la novia judía de Mike, que es viudo, y además será la profesora de Emil), los eslavos (un muchacho vecino es de origen polaco) y las mujeres en general, a las que considera inferiores.



A pesar de ello, Emil demuestra grandes dotes para el mando y una enorme capacidad manipuladora. El drama se va acentuando día a día hasta la catarsis final que conllevará el evidente mensaje de que, a pesar de todo, hay que ayudar a esos infantilizados alemanes que se han dejado fanatizar a base de propaganda y violencia. La propuesta es tan exagerada, tan inverosímil, tan ridícula en muchos momentos, que uno acaba con la sensación, a pesar de algunos detalles interesantes (como una agresión a su prima Pat fuera de campo, o la persecución de Emil campo a través por parte de otros muchachos), de haber visto un film grotesco, y con la duda de qué sentía el público norteamericano en su día después de verla (ayer en la sala las caras eran de perplejidad y de no saber bien qué pensar de lo visto). Por descontado, el máximo protagonista de la función es Skip Homeier (en su debut), el joven actor que encarna a Emil con convicción, forzando un acento alemán de manera que casi escupe las palabras, y al que también dio vida en Broadway. A Homeier lo podemos localizar en films como El pistolero, de King; A bayoneta calada, de Fuller; Los diablos del Pacífico, de Fleischer; o Estación comanche, de Boetticher, y mucha televisión en los 50, 60 y 70. En resumen, una rareza, eso sí, obligada para interesados en el cine de propaganda hollywoodiense.

No suelo leer criticas de peliculas que no he visto por si a caso, pero me alegro de haberlo hecho con ésta ya que parece una premisa muy interesante. En este caso parece que se trata al nazismo o al nazi desde un punto de vista que no recuerdo haber visto antes, más como una victima que como un enemigo ¿no? Supongo que por eso resultaba más apropiado escoger a un niño que a un adulto, alguien que simbolizaría mejor cierta inocencia que acepta o que adquierde un determinado ideal sin pretensión de causar mal. Sin querer hacer de abogado del diablo, parece también que la misma premisa comporta un grado de condescendencia importante por parte del otro lado de la trinchera...

Me apunto la película.

Iniciado por Jane Olsen

Donde esté Suspense (título tontorrón el español donde los haya ), que se quite Los otros .

Según lo que busques. Si buscas terror , como es mi caso, me quedo sin dudarlo con "Los Otros". Y mira que "Suspense" cuenta con elementos del mejor terror gótico (tormentas, vientos, mansión, etc...) y una estupenda ambientación, ademas de la grandeza y lo apropiado del B/N para un título así, y no solo eso sino que el director maneja con gran maestría los resortes del terror clásico, sin embargo cuando la balanza se inclina más al drama, a lo turbador, con esa sexualidad reprimida de la prota... pues si lo que buscas es terror, pues te acaba decepcionando, y como en mi caso, no es una peli que me apetezca ver en mucho tiempo, en cambio con "Los Otros" la habré visto unas 8 o 10 veces, y las que queden, que espero sean muchas más. Pero vamos, todo esto depende de lo que busques.

Iniciado por DrxStrangelove

No suelo leer criticas de peliculas que no he visto por si a caso, pero me alegro de haberlo hecho con ésta ya que parece una premisa muy interesante. En este caso parece que se trata al nazismo o al nazi desde un punto de vista que no recuerdo haber visto antes, más como una victima que como un enemigo ¿no? Supongo que por eso resultaba más apropiado escoger a un niño que a un adulto, alguien que simbolizaría mejor cierta inocencia que acepta o que adquierde un determinado ideal sin pretensión de causar mal. Sin querer hacer de abogado del diablo, parece también que la misma premisa comporta un grado de condescendencia importante por parte del otro lado de la trinchera...

Me apunto la película.

En esa linea va la película. Y es lo interesante: el mostrar la normalidad del día a día. Yo lo veo un planteamiento novedoso, más allá del tema propagandístico.

Iniciado por Nomenclatus

Según lo que busques. Si buscas terror , como es mi caso, me quedo sin dudarlo con "Los Otros". Y mira que "Suspense" cuenta con elementos del mejor terror gótico (tormentas, vientos, mansión, etc...) y una estupenda ambientación, ademas de la grandeza y lo apropiado del B/N para un título así, y no solo eso sino que el director maneja con gran maestría los resortes del terror clásico, sin embargo cuando la balanza se inclina más al drama, a lo turbador, con esa sexualidad reprimida de la prota... pues si lo que buscas es terror, pues te acaba decepcionando, y como en mi caso, no es una peli que me apetezca ver en mucho tiempo, en cambio con "Los Otros" la habré visto unas 8 o 10 veces, y las que queden, que espero sean muchas más. Pero vamos, todo esto depende de lo que busques.

Yo este finde veré The Innocents, además está en Filmin.Por lo que comentas, me da a mí que me va a gustar mucho, si es rollo drama/terror, buena atmósfera y tal.. seguro que me encanta.Cuando la vea comento.

Los otros me parece un peliculón, por cierto.

Iniciado por DrxStrangelove

No suelo leer criticas de peliculas que no he visto por si a caso, pero me alegro de haberlo hecho con ésta ya que parece una premisa muy interesante. En este caso parece que se trata al nazismo o al nazi desde un punto de vista que no recuerdo haber visto antes, más como una victima que como un enemigo ¿no? Supongo que por eso resultaba más apropiado escoger a un niño que a un adulto, alguien que simbolizaría mejor cierta inocencia que acepta o que adquierde un determinado ideal sin pretensión de causar mal. Sin querer hacer de abogado del diablo, parece también que la misma premisa comporta un grado de condescendencia importante por parte del otro lado de la trinchera...

Me apunto la película.

No del todo. La víctima no sería el nazi o el nazismo, que sigue siendo el culpable de todos los males, sino los alemanes que, como Emil, han sido manipulados. O sea, la serpiente que salió del huevo (Hitler y su tropa) pervirtió al pueblo alemán, cuyos valores estarían representados por el padre de Emil, un brillante científico, demócrata y defensor de la libertad, por lo cual acabó siendo asesinado. Su hijo es una víctima precisamente de los nazis. El niño sí quiere causar el mal, siempre y cuando sea en beneficio del Führer y del III Reich, lo que pasa es que lo quiere causar como si de un zombi, de un robot programado se tratase. Cuando se desvanece el encantamiento después de la catarsis final, Emil reaccionará como un niño "normal", o sea, como un niño norteamericano. Ciertamente, hay mucha condescendencia, pero intuyo, como he dicho en mi comentario, que apuntaba a la labor de recuperación del pueblo alemán que se tendría que llevar a cabo una vez finalizada la guerra... partiendo de la base que la ganaran los aliados, por supuesto.

Iniciado por tomaszapa

En esa linea va la película. Y es lo interesante: el mostrar la normalidad del día a día. Yo lo veo un planteamiento novedoso, más allá del tema propagandístico.

Bueno, tanto como la "normalidad del día a día"... No parece muy normal que en un típico y tópico pueblo norteamericano (de esos que aparecen como modelos de lo que se viene a llamar "género Americana") un niño de 11 años se vista con uniforme nazi, insulte a sus compañeros de clase y a los norteamericanos en general, trate a las mujeres como seres inferiores, intente conseguir unos documentos secretos en los que trabaja Mike, casi mate a su prima, pretenda organizar a sus compañeros de clase en una especie de guerrilla, etc.
Ahora bien, novedosa sí me lo parece, aunque no tengo claro que sea para bien. A mí no me ha gustado.

Cuando hablo de "normalidad" del día a día me refiero a que no trata al alemán, al nazi en la trinchera. Se trata de intentar entender esa "comedura de coco", ese idealismo que ha impregnado en la sociedad hasta llegar a los niños. Imagino que es extremista en varios aspectos, pero es que sobre todo, hay que situar el contexto: la guerra es extremista. Y más una Guerra Mundial.

Iniciado por tomaszapa

Cuando hablo de "normalidad" del día a día me refiero a que no trata al alemán, al nazi en la trinchera. Se trata de intentar entender esa "comedura de coco", ese idealismo que ha impregnado en la sociedad hasta llegar a los niños. Imagino que es extremista en varios aspectos, pero es que sobre todo, hay que situar el contexto: la guerra es extremista. Y más una Guerra Mundial.

Por supuesto, pero incluso la propaganda se supone que ha de ser verosímil para ser efectiva (o eso creo), y a mí esta película no me lo parece. De todas formas, ya he dicho en mi comentario que me gustaría saber qué sentían, qué pensaban, los espectadores de 1943 en Broadway o posteriormente en el cine al ver la obra. No es el único ejemplo de film propagandístico donde se extreman los planteamientos para obtener más fácilmente sus objetivos, pero en este caso me parece demasiado poco creíble, precisamente por el hecho de encarnar el problema en un niño de 11 años trasladado a un idílico pueblecito norteamericano. También Welles se ocupó de un nazi (este sin la disculpa de ser un niño) instalado pacíficamente en un pueblo típico en The Stranger, aunque en este caso la propaganda no era para buscar "salvar" a los alemanes ingenuamente engañados por el nazismo, sino para denunciar sus horrores (con la guerra ya acabada y los campos de exterminio abiertos). El guion me parece muy simplista (y la realización bastante vulgar, dicho sea de paso). Supongo que una estrella como March participó por convicción patriótica (en el teatro,el papel lo encarnó Ralph Bellamy), pero el producto como tal me parece francamente mediocre. Recordemos que se trataba de una producción de Lester Cowan Productions, o sea una producción independiente (distribuida por United Artist).

Curioso. Porque eso que criticas fue precisamente lo más alabado de la obra en Broadway y de la adaptación al cine. El joven Skip Homeier. Que por cierto, en esa época de niño era Skippy.

Iniciado por tomaszapa

Curioso. Porque eso que criticas fue precisamente lo más alabado de la obra en Broadway y de la adaptación al cine. El joven Skip Homeier. Que por cierto, en esa época de niño era Skippy.

Más que al chaval, mi crítica va por el personaje. Su interpretación es exagerada, muy histriónica, pero quizá es la manera como autores y director querían que se representara a Emil. Ya dije que me parecía que actuaba con mucha convicción, pero eso no garantiza una buena interpretación. De todas maneras, esos "niños maravilla" en cine o en teatro suelen llevarse los elogios a poco que mantengan el tipo. Y en aquellos años 30 y 40 hubo una temible proliferación de niños actores.