¡Qué va! Ocurre que acabo de abrir un asilo para películas envejecidas, y pienso ponerme las botas, porque casi todas las de los setenta tienen artrosis y problemas de próstata. Dinerito, dinerito, dinerito... Mmmmmm. ) Lo único que tenéis que seguir haciendo es forzar el envejecimiento de las más frescas, para que el cupo se amplíe, caramba. Con respecto a esa estupenda versión del hombre invivisible... impecable. Una pena que no la dirigiera Edward D. Wood Jr. Habría sido incluso mejón. Eso sí, las carreritas del invisible son la hostia. ¡Que aprenda Whale, coñe!Lo empiezas a ceptar... Sera la edad ?
Por cierto, ¿qué había de nuevo de la Hammer? Como diría Porky: "Hummm. ¿Qué hay de nuevo viejo?"...