¡OLE!
¡Mas razón que un santo, dios mío! Y eso que todavía no lo he jugado pero he visto mucho. Si no es por la jugabilidad es por el trabajazo, por la forma de arte. Ni siquiera una mísera nominación a BSO, que es una MARAVILLA la primera vez que la escuché me quedé verdaderamente impresionado.