Granada, 23:15 de la noche, en plena final de la Copa del Rey, proyector a tope de emoción, con prórroga y.... ¡¡¡PUF!!! :>: , se hace el silencio, que no la oscuridad: Apagón de sevillana que nos deja sin poder ver el final del partido :((( . Gracias a que tenía el proyector conectado a un SAI :amor , que si no con el calor que hace la lámpara habría estallado al no poder refrigerarse. Ya empezamos otra vez.
Por eso, recomiendo encarecidamente disponer de un SAI por si los apagones, por 52 euros que me costó no puedo pedir más.