Esto es de antes de internet. Veo a los del “otro bando”. El que tenga la opinión más cafre asumo que es el portavoz de los “otros”. Y respondo a lo que diga el radical.
Los “otros” se indignan y buscan al radical de “mi bando” y le responden a ese. Al final un diálogo de extremos visceral que no representa a casi nadie.
Todos tenemos un sesgo. Lo que no nos gusta nos chirría y creemos que tiene demasiada repercusión. Lo que nos gusta lo asumimos como normal y no pensamos que genera ruido porque lo olvidamos pensando que es lo “normal”.
Si se sube el precio corte inglés (máximo garantizado) entonces sube el precio medio.
Lo que no compro es que el precio de los juegos no haya estado subiendo. Ha subido de forma indirecta con dlcs, seasons pass, microtransacciones, propaganda integrada y juegos no acabados que salen al mercado.
PD: puedes encontrarme a alguien que diga que las políticas de Nintendo son modernas y adecuadas?