Indignación policial por las dudas creadas sobre la mochila del 11-M
La UCI considera "disparatado" vincular a los islamistas con ETA
LA VANGUARDIA - 17/03/2006
Redacción. MADRID
Indignación es la palabra que mejor define el estado de ánimo en el interior de la policía a raíz de la polémica originada por la custodia de la bolsa que contenía la bomba del 11-M que pudo ser desactivada. Lo dijo ayer el comisario jefe de la unidad central de inteligencia (UCI), José Cabanillas, en declaraciones a la Ser.
Otro síntoma claro de ese malestar fue el comunicado conjunto firmado por todos los sindicatos policiales en el que éstos lamentan "la utilización en el debate político de elementos, hechos o consecuencias de la investigación policial o judicial de los mencionados atentados, que pueda llevar a la opinión pública a dudar de la eficacia, honestidad o neutralidad en la actuación de los profesionales del Cuerpo Nacional de Policía".
Cabanillas aseguró ayer que es "disparatado" asegurar que algún miembro de ETA tuvo algo que ver con los atentados del 11 de marzo del 2004 y que la investigación ha demostrado sobradamente quiénes fueron los autores materiales de aquella masacre. Aunque los extremos que han generado la polémica sobre la custodia de la bolsa número 13 ya han sido aclarados en el juzgado de la Audiencia Nacional que lleva la investigación, Cabanillas insistió en que todo lo ocurrido entra dentro de la lógica. El comisario explicó que la bolsa que le fue mostrada al inspector jefe en el juzgado era nueva y comprada en el mismo establecimiento en donde supuestamente se adquirió la utilizada aquel 11 de marzo, mientras que la original estaba muy estropeada por el paso del tiempo. "Esta mochila era nueva, la otra estaba ajada, estaba sucia y lógicamente esa diferencia a cualquiera le llama la atención", manifestó el mando policial, restando relevancia al testimonio del inspector jefe que declaró no identificar la bolsa cuando ésta le fue mostrada por el juez Del Olmo la semana pasada.
Cabanillas explicó también que el explosivo encontrado en esa bolsa fue el mismo que los restos descubiertos en la furgoneta encontrada en la estación de tren de Alcalá de Henares, lo que relaciona claramente a los miembros del comando con la bolsa encontrada en el interior del tren que explotó en la estación de El Pozo.
Por su parte, los sindicatos policiales, que han elaborado el documento conjunto a pesar de que no atraviesan el mejor momento en sus relaciones, denuncian la existencia de "ciertos profesionales (de la información) que por su afinidad política, por su ambición o por su ausencia de escrúpulos en cuanto a los medios que utilizar para alcanzar sus metas profesionales, se prestan a difundir e incluso inventar noticias, rumores, suposiciones e interpretaciones interesadas de hechos que desgraciadamente contribuyen a ese clima de confusión, circunstancia que es aprovechada por otros para descalificar a quien sólo expone hechos".
Los sindicatos aprovechan la ocasión para criticar que los diferentes "gobiernos de turno" utilicen criterios que no se ajusten a la "estricta profesionalidad" a la hora de elegir a los responsables policiales en determinados puestos. Criterios en los que se prima la afinidad ideológica y otros aspectos ajenos sobre lo puramente profesional. La crítica va directamente dirigida hacia los jefes de la Comisaría General de Información, encabezada hoy por el comisario Telesforo Rubio, sin la trayectoria profesional con que hasta ahora habían contado quienes antes que él habían ocupado un puesto de tanta responsabilidad.