Extraña peli de Mike Hodges, con Mickey Rourke en uno de sus mejores papeles, Bob Hoskins y Alan Bates, basado en un libro de Jack Higgins, que también he podido leer.
Cuenta la historia de Fallon (Rourke) un terrorista del IRA retirado, acosado por sus propios compañeros y por sus remordimientos, ya que su último atentado se convirtió en un baño de sangre al volar por error, un autobús escolar.
Fallon sobrevive como puede, pero es un hombre acorralado y su última esperanza es conseguir un pasaporte que le saque del país. Le ofrecen el pasaporte y una buena suma de dinero por matar a un mafioso por cuenta de otro, Jack Meehan (Bates, escalofriante) pero durante el asesinato hay un testigo imprevisto, un cura (Hoskins). En un momento de debilidad, Fallon no lo mata, y el sacerdote decide intentar salvarle.
Una peli rara, bastante desconocida (conozco a pocos que la hayan visto, y menos aun que hayan leido el libro) muy negra y llena de desesperanza. Tal vez el último gran papel de Rourke hasta Sin City...