Hacia el final de la película, corte brusco y aparece Anakin Skywalker despertándose sudoroso en la cama. Todo ha sido un sueño premonitorio. Decidido, envía un mensaje a Obi-Wan avisando de que se dirige a la residencia del Canciller Palpatine, puesto que ha descubierto que él es el Lord Sith que andaban buscando.
Palpatine tienta a Anakin con el poder del lado oscuro para salvar a Padme. "Padme no morirá y tampoco me convertiré en Darth Vader". Sidious sorprendido de escuchar ese nombre de boca del mismo Skywalker, saca su sable de luz y ataca. La pelea es espectacular. Obi-Wan y Mace Windu llegan justo a tiempo para ver los últimos instantes de la misma, en la que Anakin decapita a Darth Sidious. Skywalker informa (mintiendo) que antes de morir el sith le habló sobre la orden 66 y el plan para destruir a la República. Se pone fin a la guerra y los clones pasan por el taller para ser desactivados.
Nacen los gemelos Skywalker. Padme y Anakin acuden con ellos a Tatooine a visitar la tumba de su madre.
- Hora de regresar a Coruscant.
- ¿Qué tienes que hacer?
- Debo hablar con el maestro Yoda.
- ¿Ahora que la guerra ha terminado?
- Precisamente. Tengo que avisarle.
- ¿Sobre qué?
- Sobre la profecía. Sobre el equilibrio en la Fuerza. De que existen otras maneras...
(Silencio. Padme con cara no entender nada).
- Cosas de los Jedi, ¿no?
(Ambos se miran y se ríen. Con cada uno de los gemelos en sus brazos, alzan su vista hacia el horizonte (pasamos a plano de espaldas y a contraluz) para ver el atardecer de los dos soles de Tatooine. Fanfarria final y títulos de crédito).
Muchas veces cuando se escogen directores manejables, tienen este tipo de inconvenientes. La debería dirigir Kathleen Kennedy directamente. O el consejo de admón de Disney