Actualmente, quitando a las mafias organizadas (top-manta), no conozco a nadie, a nivel privado, que venda CDs, juegos o software informático y con ello obtenga un beneficio comercial. Esto sí pudo ocurrir en cierta escala cuando, hace diez años (quizá más), las unidades CD-RW costaban 300 euros y los CD-R, unos 7/8... pero no hoy, en una época en donde el hardware y el software cuestan lo que una peli en DVD original. Por cierto, recuerdo que todos pagamos un cánon por esas copias sin autorización expresa del autor con cada CD-R que compramos.