Yo hay mucha gente a la que no trago, dawson, pero suelo tener un motivo. Por eso lo comentaba, porque en el caso de Bardem el motivo -y no me dirás que no es así- suele ser político, y me parece demencial que se diga que un actor no nos gusta por sus ideas políticas (cuando, insisto, no hemos cruzado palabra con él).
Imagínate que cada vez que Mel Gibson estrenase película (o Clint Eastwood o George Clooney...) una parte de los comentarios fuesen del tipo "pues preferiría que el protagonista fuese otro actor, que este me cae gordo por ser republicano/demócrata". Luego diremos que "Cinefilia" pierde nivel.