Gracias por estos posts dedicados a tan entrañables actores/actrices, Alcaudón.

En el caso de Douglas, es impresionante la calidad y variedad de su filmografía a lo largo de los años.

Junto a Burt Lancaster (con el que coincidiría en la estupenda Siete días de mayo, entre otras), uno de esos actores físicos, que supieron moverse en los más variados registros según alcanzaban la madurez, con una admirable dignidad, capaces de interpretar con convicción y naturalidad tanto a personajes íntegros como a tipos peligrosos y amorales, aunque siempre con halo de humanidad.

Ahora a por su filmografía de los años 60, con joyitas como Dos semanas en otra ciudad, Un extraño en mi vida, Los valientes andan solos o El último atardecer, entre muchas otras...

¡Que te sea leve, compañero, aunque el esfuerzo bien lo vale!