La historia de la madre el niño y el doctor me ha gustado también, y ese alegato a favor de la eutanasia me ha pillado de sorpresa, pero me ha parecido que encajaba bien en una peli de este tipo, y todo el rollo de los huesos y las calaveras da para unas imágenes muy potentes.
Los momentos estrafalarios del final, pues habrá que ver por dónde van, si tienen desarrollo en la siguiente película o qué, a mí tanto ese final como la fiesta donde dan de beber al niño me parece Danny Boyle de cachondeo diciendo "esto sería Inglaterra si se cae la civilización", incluso si no lo tragas no me parece que sea como para que los 3 últimos minutos te arruinen la peli entera. También me ha gustado que el personaje de Aaron Taylor-Johnson, que casi sería un antagonista en una peli convencional, aquí apenas se le juzga, se da por sentado que las circunstancias son extremas, y que hasta los hombres buenos tendrían personalidades extremas.