Me sorprendió ver a Hitch junto a ella en Mónaco. Pensé que tras su escapada de Hollywood el había quedado tan tocado que habrían perdido la relación, o al menos eso tenía entendido.

Por cierto, el momento Hitch es genial. Ves a todos los invitados en la piscina, haciendo burlas, riendo... Mientras el mago del suspense está sentado, en las sombras con su conocido puro, en un se supone caluroso día de verano. Daba hasta miedo.