Dependerá siempre de la calidad del proyector y de la tele, la mayor ventaja de la tele para mi gusto es que no necesitas nada más, con las de ahora hasta te reproducen divx, mkv, etc, vía usb, y con el proyector siempre dependes de aparatos y accesorios que hagan estas funciones. También la tele es mucho más cómoda, la enciendes y listo, con el proye tienes que tener ciertas precauciones para cuidar la vida de la lámpara, y el ciclo de apagado y encendido no es instantáneo, hay que realizar una instalación y reducir la luz ambiente lo que puedas.
Dicho esto, el tamaño y sensación de inmersión y cinematográfica que ofrece un proyector creo que compensa con creces estas cosillas, una vez que uno ve un par de películas y juega a algún videojuego ya no hay vuelta atrás. Por ponerte un ejemplo mi mujer era reticente a tener un proyector cuando decidi a comprarme el primero hace cinco años, ahora las teles le parecen directamente un timo. Tenemos un lcd de 40 pulgadas para ver la tele normalmente, pero para todo lo demás...
Sobre la luminosidad y su control, también hay proyectores como el panasonic que yo tengo que llevan unos sensores y regulan la luminosidad, no es por exagerar pero en mi salón puedo jugar perfectamente a videojuegos de día y sin bajar persianas, o ver un partido de futbol por la tdt. Para cine, eso sí, lo recomendable siempre es reducir la luz y reflejos todo lo que puedas. El tema es buscar lo apropiado para cada caso, en el tuyo te recomiendo un lcd por tus limitaciones de espacio, te dará más pulgadas y son mucho más sencillos de colocar. Y créeme que esto es importante, cada vez quieres una imagen más grande, esas 80 pulgadas para ver a dos metros y medio lejos de parecerme mucho me parece el tamaño mínimo que yo tendría.