De más a menos.
Me ha entretenido mucho la loquísima propuesta. Pero es que cuando llegamos a la resolución final, a la parte emotiva, estás ya completamente agotado. El ritmo endiablado de tanta locura en su primera hora y media te deja exhausto y, a mi personalmente, me ha quitado un poco el interés por su final.

A la cinta le vendrían de perlas 20 minutitos menos. No se haría tan repetitiva y el final sería más efectivo.

Eso sí, Michelle Yeoh sensacional. Y el resto del reparto divertidísimo.