Decís que soy un hombre sin señor, pero os equivocáis: yo soy mi propio señor
http://fortalezaescondida.blogspot.com
Sin embargo, sería interesante saber como acabó la víctima, porque tu fíjate por donde que también tuviera que ser ingresada en la misma institución por padecer depresión aguda. Sería realmente catastrófico, que tanto la víctima como agresor (o verdugo) pagase y fuera pagada con la misma moneda.
La víctima acabó tocada. Dedsde luego es triste que se diera ese caso que comentas.
Siguiendo con el tema, mis conocidos del sector "loquero" me han comentado que incluso ese tipo de actitudes se instalan en familias que lo repiten de generación en generación: el bisabuelo jode la vida al abuelo, el abuelo al padre, el padre al hijo, etc... Por ejemplo, casos de personas que se muestran tremendamente amables con los invitados hasta el punto de hacer que su mujer / hijos tengan que actuar de forma servil ante ellos so pena de broncas o acusaciones de mala educación, de dejar en mala posición y numeritos de autoflagelo; o padres que enseñan a sus hijos a "ser los mejores" y "saber defenderse" y alaban las muestras de chulería y matonismo de sus churumbeles (de estos todos hemos oido hablar, sus formas son famosas entre los profesores de colegios e institutos)
Gente que es educada de esta forma a veces suele llevar estos patrones de conducta a su vida adulta, o se convierte en todo lo contrario, gente increiblemente respetuosa con un enorme complejo de culpa. En el primer caso, son acosadores potenciales, en el segundo, víctimas potenciales.
Lo que está claro es que los parámetros mentales de los acosadores no discurren por los mismos derroteros que el del resto de la gente; conocen las palabras talismán como nadie (libertad, amor, verdad, honestidad, etc...) pero las usan para todo lo contrario. Uno de estos puede dominar a todo un país con su discurso contradictorio (por ejemplo, Hitler y cia, cuyas declaraciones siempre estaban adornadas de amor a la patria, libertad, etc...)
En los casos particulares, pueden convencer a amplios grupos de personas para demonizar a su objetivo, buscando errores y cosas malas en su victima para encubrir el mal absoluto de sus intenciones; estas intenciones verdaderas solo son claras para las victimas, los demás no conciben que alguien pueda tener tan mala fe, de hecho esto es lo que les protege, que para el común de los mortales es dificil concebir que alguien pueda hacer semejantes cosas.
:ipon
Decís que soy un hombre sin señor, pero os equivocáis: yo soy mi propio señor
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Es justo lo lógico en los casos en los que el agresor, que evidentemente sabe discernir lo bueno de lo malo, se justifica ante su particular audiencia para cometer el atropello, sin embargo ese espectro de personas que le siguen, se dejan convencer de forma fácil porque comulgan con las mismas justificaciones que el tipo líder.En los casos particulares, pueden convencer a amplios grupos de personas para demonizar a su objetivo, buscando errores y cosas malas en su victima para encubrir el mal absoluto de sus intenciones; estas intenciones verdaderas solo son claras para las victimas, los demás no conciben que alguien pueda tener tan mala fe, de hecho esto es lo que les protege, que para el común de los mortales es dificil concebir que alguien pueda hacer semejantes cosas
Os juro por mi madre que si a mi mujer le ocurre esto no sigue en el trabajo, ya nos las arreglaremos. Ella me dice quien es y tras ponerle un saco en la cabeza al hijo puta le deformo el rostro.
Os lo juro. Estas situaciones, si las consiente la ley, no las debería consentir la pareja.
Me faltan solo los hijos, pero siempre me ha podido más la dignidad humana. No digo que sea el camino correcto, pero siempre he hecho cosas que me han perjudicado en pro de lo humano.
Mi cuñado está de baja por estrés por culpa de un "jefe" incompetente al que no le gusta su trabajo y se dedica a joder a los demás y a decirle "no te despido porque estás casado y el trabajo está muy mal". Mi suegro quiere hablar con él, pero creemos que no es buena idea. Pero bueno, la vida pone las cosas en su sitio con el tiempo.
Cállate, díaz, anda.
Toshiro, yo lo que digo es que esta gente no se puede ir de rositas, como se suelen hacer. Y no cuento aquí una anécdota al respecto que ya pasó con mi hermana y demostraría que a veces un trabajo perdido lleva a una cara merecidamente destrozada y a una humillación de la persona durante meses (el jefe en cuestión).
No digo que sea lo correcto, digo que no hay manera de frenarlo a poco caliente que seas.
Yo fuí víctima de lo que he señalado en negrita.
Mi padre era un hombre frío, autoritario y sobreprotector. Yo, desde pequeño, me acostumbré a hacer todo lo que él me decía sin quejarme, sin pensar: era como un robot. Esto me provocó una autoestima muy baja. En la escuela tuve muchos problemas. Sufrí acoso escolar durante muchos años. Estaba considerado "el tonto de la clase", pero para mí era normal porqué era el mismo ambiente que tenía en casa.
Mi madre murió cuando yo era pequeño. Lo único que recuerdo de ella es que me pegaba. Años después de su muerte, mi padre se volvió a encontrar con una amiga de juventud, empezaron a salir juntos y, al cabo de un tiempo, se vino a vivir con nosotros. Ella era igual que mi padre. Mi casa era una especie de cuartel militar.
Lo he pasado tan mal que, para mí, mi vida empezó desde que vivo solo, hace cinco años.
Última edición por Marc Millà; 22/09/2009 a las 03:12