Es lo que decimos, tripley. Hay que considerar que en muy poco tiempo, protagonizó enormes papeles que cualquiera de las mejores tardan años en acumular, y muchas otras, jamás lo logran en toda su carrera. Julia, Kramer vs kramer, El cazador, Manhattan, La mujer del teniente francés, La decisión de Sophie, Memorias de África... Son todas joyas interpretativas. Añade a las críticas elogiosas, los premios acumulados (incluidos dos Oscar) y la inexperiencia de la escasa edad, y tenemos ese "natural engreimiento o endiosamiento".
Es natural. Cualquiera hoy en día, con la cuarta parte que hizo ella, va sacando pecho tan alegremente.