Ah, el eterno punto escabroso en cuanto al festival de San Sebastian...

Pues sí, lo cierto es que si en cualquier sesión de cine normalmente alguien osara comportarse la décima parte de gamberramente de lo que se vive en esta Semana, yo le cogería, le partiría las piernas, y luego me las comería., y después, no contento con eso, maldeciría a todos sus descendientes hasta la septima generación. Y no sentiría ni el más mínimo remordimiento en hacerlo.

Peeeeeero, en cuanto a la Semana de Donosti, lo cierto es que siempre ha sido así y siempre será así. Yo lo sé, lo asumo, y por eso allí ni se me ocurre esperar silencio en la sala ni mucho menos le chistaría al de al lado por estar imitando a Chiquito como gracia mientras vemos "Oldboy" (es sólo un ejemplo) o por cacarear durante la escena de la ducha de "Psicosis". Sí, estoy siendo extremo y crudo para que los que no van lo entiendan y se disuadan de ir (así no habrá tanto problema con las entradas como hay últimamente). Ese es el ambiente de la Semana, la gente cacarea, hace coñas en alto todo el rato, bosteza a grito pelado, se queja de que una película le parece un coñazo cuanto a ti sin embargo te está encantando, etc, etc.

Así que si alguien no puede soportarlo, en efecto, lo mejor es que no vaya, porque lo que no va a pasar, ni sería bueno que pasase, es que se impusiera un espíritu diferente al que ha sido espontaneamente durante ya 16 AÑOS.

Sí, también ha habido ocasiones en que lo he sufrido, por ejemplo el año pasado se proyectó alguna película Hammer en el Teatro Principal, y el cachondeo fue el mismo que si estuvieras viendo "Braindead". La gente no distingue ni discrimina. Pero aún así, en esos momento sólo pienso que es un pena que esa película no la echen en otro sitio más tranquilo, y no pretendo que el festival de San Sebastian sea de otra manera. Porque este es un festival del cine y la coña a partes iguales. Disfrutalo, si lo sabes y lo asumes y lo aceptas, lo disfrutas, y mucho.

Más duro debe de ser para los directores, que a menudo están presentes mientras proyectan su película, y la peña se descojona. Hay miles de anécdotas en cuanto a eso, en el "2000 maniacos" del año pasado se contaban algunas, como un director extranjero, no recuerdo cual, al que hubo que explicarle quién era Chiquito de la Calzada, y porqué a la gente le recordaba eso su película...