Personalmente siempre me ha parecido que el concepto, la idea, de Prometheus es interesante y que podía haber salido una gran película. Sin embargo el montaje de esa película, con fallos de continuidad y de sentido tan groseros y vergonzosos para una película de su presupuesto, me resulta aberrante, y un despropósito tan grande y vergonzante que siempre me ha sorprendido que llegase a ver la luz... tal y como nos llegó a las salas de cine.
La idea, prometedora (pun intended), pero la ejecución, vergonzosa e inadmisible, viniendo de un director como Scott.