Me ha explotado la cabeza. Pienso en la de cosas que podría rodar este señor en Chinchón. Podría emplear las viviendas para hacerlas pasar por italianas o mexicanas, quién sabe. Desde Darjeeling no supedita su labor a las localizaciones exteriores. Tras rodarla terminó exhausto, pero de nuevo podría salirle algo glorioso, en ambientes más inspiradores. Ahora mismo se me viene a la cabeza el simpático anuncio que hizo para Prada: