El principal problema respecto a la primera parte es que los cambios de divisas son muy desfavorable frente a los que había en 2009-2010, que tuvo casi los mejores de la historia. La inflación puede mitigar un poco este efecto, aunque no del todo. Y sin tener en cuenta que la cantidad de espectadores, sobre todo en los principales mercados, será muy difícil de repetir.
Personalmente, creo que en Norteamérica puede repetir las cifras de la primera parte (750-800 millones), que en el resto del mundo quitando China caerá. La primera hizo 1.800 millones y creo que esta se puede quedar en torno a los 1.100-1.200 (hace unas semanas pensaba en 900, pero viendo los resultados del reestreno de la primera parte me he animado a subirlo. Y hay que recordar que no se puede contar con la aportación de Rusia, donde la primera parte hizo más de 100 millones).
A nivel mundial sin contar China tendríamos unos 2.000 millones, por lo que la clave es China. Los primeros datos de preventa auguran unas cifras tremendas. En condiciones ideales (100% de salas abiertas y sin intervención estatal) la película tiene potencial para hacer 1.000 millones allí. Pero está condicionada a que un mes después del estreno llega el año nuevo chino que es el periodo de mayor audiencia en cines y suele estar reservado en exclusiva a películas locales (este año además con la secuela de una película que ya recaudó 700 millones como atracción principal). Es cierto que el mercado chino suele recaudar la mayor parte del dinero en las primeras 2 o 3 semanas, pero podría ver cortada su trayectoria debido a este factor.
En mi opinión, va a batir a Endgame como la mayor película de Hollywood en China (4.200 millones de yuanes), pero pensar en llegar a los 1.000 millones de dólares (en torno a los 7.000 millones de yuanes) es algo que no depende de su potencial, sino de factores externos ajenos a los méritos propios de la película.
Tras este rollo, yo diría que puede irse a los 2.700 o 2.800, pero no me parecen descabellados los 3.000.