Tema: TODO sobre Bette Davis, la más grande entre las grandes

Lo que no consiguió William Wyler con Sylvia Sidney lo obtuvo después con Bette. Yo solo digo eso, andaba alterado el director y sus hormonas por entonces. Y según la actriz de Bitelchús o el tridente consecutivo de Fritz Lang, no estuvo nada satisfecha del trato de Willie.

Iniciado por Otto+

Lo que no consiguió William Wyler con Sylvia Sidney lo obtuvo después con Bette. Yo solo digo eso, andaba alterado el director y sus hormonas por entonces. Y según la actriz de Bitelchús o el tridente consecutivo de Fritz Lang, no estuvo nada satisfecha del trato de Willie.

Oye que la peli esta sureña del Curtiz no está mal si obviamos la cara de estar haciendose caquita del prota y Bette sensual y sexual tope natural.Genial.Ya lo dijo el gran jefe que en esta Bette sí le moló.
Por cierto creo que lo de Sir Otto está al caer

Iniciado por hannaben

Oye que la peli esta sureña del Curtiz no está mal si obviamos la cara de estar haciendose caquita del prota y Bette sensual y sexual tope natural.Genial.Ya lo dijo el gran jefe que en esta Bette sí le moló.
Por cierto creo que lo de Sir Otto está al caer

Quitas a Bette del film y .... sufre porque le quitas el elemento más reluciente y atrevido; tiene buenas secuencias el film y la historia interesa, pero en su desarrollo es demasiado monótono, arrítmico, y Barthelmess esto de acuerdísimo en que resulta muy blandito. Acabamos de salir del periodo silente, aún hay mucho que ajustar. Se nota.
En ese aspecto es verdad que un realizador con la soltura de Mamoulian fue un visionario; de los más grandes realizadores de la época pre-code sin duda. Aunque este film no le pegue al director de ascendencia soviética.
Habrá que comparar al Curtiz de este film con el de "20000 años en Sing Sing". En un ambiente claustrofóbico Curtiz se desenvuelve bien, y de hecho las mejores partes de "The cabin in the cotton" son las que muestran eso precisamente, si acaso demasiado teatralizadas pero logradas por la interpretación de los secundarios. Y además con ese tonillo mafiosillo de "estás con los tuyos o con tu patrón"....

La peli ofrece peero el gran lastre es su prota...le quita clima a todo.Hubiera podido ser no peliculón pero sí una de las pioneras de ese cine que a mí el genero tampoco me encanta peero Curtiz tenía lo suyo....

De momento las he visto todas cronologicamente menos Way Back Home (1931)


Proximamente

Bette Davis in a publicity portrait for The Sisters (1938) - photo by Elmer Fryer

Bette Davis, 1931

Uno.

Richard Barthelmess (1895-1963) fue un actor muy importante en el cine mudo y en los primeros años del sonoro. De hecho, estuvo nominado por partida doble en 1929 por THE PATENT LEATHER KID (1927), de Alfred Santell y por THE NOOSE (1928), de John Francis Dillon. Al menos algunos cinéfilos le recordarán por su papel en la excelente SÓLO LOS ÁNGELES TIENEN ALAS (1939), de Howard Hawks.



Dos.

Ya tengo copia de las películas de la actriz que van de la 8ª a la 15ª, o sea, SO BIG!, THE RICH ARE ALWAYS WITH US, THE DARK HORSE, THE CABIN IN THE COTTON, THREE ON A MATCH, 20,000 YEARS IN SING SING, PARACHUTE JUMPER y THE WORKING MAN.

Ahora hay que tener tiempo primero para verlas y luego para comentarlas y por supuesto compatibilzándo esta revisión con las propias y con las ajenas que uno lleva entre manos.

Iniciado por Otto+

Lo que no consiguió William Wyler con Sylvia Sidney lo obtuvo después con Bette. Yo solo digo eso, andaba alterado el director y sus hormonas por entonces. Y según la actriz de Bitelchús o el tridente consecutivo de Fritz Lang, no estuvo nada satisfecha del trato de Willie.

Bette tampoco bueno algo sí
Wyler era duro..

Iniciado por hannaben

Bette tampoco bueno algo sí
Wyler era duro..

Es cierto que Wyler era duro, pero justo. Me parece muy bien que apretara a los actores cuando creía que podían dar más de sí. Era un tipo muy inteligente y conocía la tendencia de muchos a ir "con el piloto automático" en la interpretación.

Iniciado por tomaszapa

Es cierto que Wyler era duro, pero justo. Me parece muy bien que apretara a los actores cuando creía que podían dar más de sí. Era un tipo muy inteligente y conocía la tendencia de muchos a ir "con el piloto automático" en la interpretación.

Sidney cita horarios de trabajo extremos (no menos de 15 horas diarias) y estando rodando con Wyler "Dead End" junto a Joel McCrea y Humphrey Bogart llegó un momento en que se desmayó, tropezó y dio con su nariz contra una mesa de cristal. Acabó hospitalizada con ambos ojos ennegrecidos del golpe y requirío dos decenas de puntos de sutura en en la frente apareciendo de nuevo en el plató de rodaje con vendaje aparatoso y un parche en un ojo.
Cuando se reinició el rodaje, la actriz estuvo constantemente al borde de las lágrimas pues la exigía demasiado no estando recuperada. La hacía repetir una escena 30 o 40 veces, anímicamente la estaba trayendo por la calle de la amargura y tenía problemas para recordar sus líneas. Cuando el biógrafo de Wyler la entrevistó en 1990 lo llamó "sadistic son-of-a-bitch. He had a habit of treating you badly and then trying to make love to you. He was not nice to me on the set, but he tried very hard to get into bed with me". Luego cuenta que tras una discusión en el rodaje que la hizo abandonar el set desmoralizada, apareció por su casita ("hideaway" lo llama, o sea, aislada y modesta) frente a una playa. "Fortunately, Luther Adler was there with me at the beach. Nobody knew I was having an affair with Luther. If it hadn´t been for him, I night have ended up in the crazy house. Wyler almost put me there"

En otro momento en el que Adler estuvo en el rodaje, Wyler la increpó diciendo que podía tener a una actriz que cobrara 150$ haciendo mejor su trabajo y que Adler le bajó finalmente los humos cogiéndole del brazo advirtiéndole que "dejara de comportarse de esa manera con alguien tan profesional como élla". Desde ese momento, hubo paz.

Pero todo esto encaja con el affaire que tuvo Bette con Wyler inmediatamente posterior en el rodaje de Jezabel: "I adored Wyler. He was the only male strong enough to control me. The sexual sparks were there from the beginning".

Hubo más problemas. Una secuencia en la que la actriz Marjorie Main abofetea a Bogart tuvo que repetirse bastantes veces y llegó un momento en el que el actor con la cara enrojecida se acercó a Wyler y le dijo "como tenga que abofetearme otra vez más, te aseguro que friego el suelo con élla".

McCrea parece que alinea en cierta manera del lado de Sidney en cuanto a opinión respecto a Wyler: "He tended to look out for one or two actors in a picture, and.... shit on the rest".

Pero bueno, la propia Sylvia no se libra tampoco de palabras poco enstusiastas hacia su persona enboca de gente importante: en teatro trabajó con un jovencísimo Sidney Lumet como actor y éste la pone a caldo de forma corta pero contundente. De todas maneras, la Sidney tuvo una infancia, madre de todas las batallas posteriores, realmente complicada. Tímida, muy sensible (ser objeto de atención de una masa de personas y fans llegó a hecerla llorar cuando llegó a Londres para rodar con Hitchcock), objeto de bullying entre los chavales de su edad y luego desarrolló una etapa de rebeldía que se mantuvo más o menos posteriormente sin perder la autocrítica. Como la rebeldía que al parecer desarrolló Frances Farmer, por cierto, que coincidió con élla en la misma compañía teatral, y a cuyas decepciones con su carrera y la gente que dirigía sus designios cabe adjudicarle el deterioro que sufrió sumiéndose en el alcohol por lo que he leído en un fragmento de una entrevista con Howard Hawks.







A Sylvia le gustaba la tranquilidad y pasar inadvertida, diría yo. Y prefería mil veces vivir en Nueva York antes que en Hollywood, al que principalmente volvió por temas económicos o por su clima más benigno, en ambos caos pensando en su hijo.

Iniciado por Otto+

Como la rebeldía que al parecer desarrolló Frances Farmer, por cierto, que coincidió con élla en la misma compañía teatral, y a cuyas decepciones con su carrera y la gente que dirigía sus designios cabe adjudicarle el deterioro que sufrió sumiéndose en el alcohol por lo que he leído en un fragmento de una entrevista con Howard Hawks.

Hollywood, la casa de los sueños y las pesadillas. Esas sospechas de supuesta comunista, que no parece que lo fuera (el comunismo especialmente se adhería a los escritores y/o guionistas más algunos realizadores - no muchos), me hace creer que fue arrojada al vertedero por una industria demasiado insensible con los individuos, como ya se podía apreciar por entonces.
Sylvia Sidney apunta hacia 1937 el comienzo de la crisis de Farmer porque estuvo cuidándola tras terminar aquélla una relación con Leif Erickson, y parece ser que Clifford Odets y su mentalidad e infidelidades terminaron por rematarla, así que lo que dice Howard Hawks y lo que viene después (ése no merecer la pena conservarla con esos antecedentes, viendo la generación de actrices que llama a la puerta) apuntala la idea de que no tuvo tiempo siquiera para convertirse en juguete roto.

PD: Ida Lupino intentó llevar a la pantalla la autobiografía de Farmer, Will There Really Be a Morning?, a comienzos de los '70, pero como es bien sabido nunca se realizó dicha película. De todas maneras, la autobiografía se descubrió bastante dudosa en su autoría ya que al menos una buena parte pudo haber estado redactada o dirigida por una amiga suya, una tal Jean Ratcliffe, con motivos no muy claros, por no decir sospechosos. La hermana de Frances, Edith, también publicó su propia versión a finales de los 70'. Ninguno de estos libros fue el que sirvió de base al film "Frances" protagonizado por Jessica Lange; fue otro, "Shadowland", de William Arnold, la biografía de la actriz comprobada farsa y camelo más adelante, con lo que dicho film cuenta una historia que tiene bastante de ficción. No hubo lobotomía.

Pues a pesar de todo, Frances me parece una notable película. Y Lange está magnífica, con lobotomía y todo. Por cierto, en su momento, hasta el propio Anthony Hopkins alabó su interpretación, señalando que era la interpretación femenina más impresionante que había visto.

Intuyo que Wyler tenía una vena sádica que salía a relucir en algunos momentos de los rodajes. Aparte de que estaba más salido que el pico de una plancha. Esa época de martirio de Sidney coincide entre el final del matrimonio de Wyler con la actriz Margaret Sullavan y el idilio de aquel con la Davis. En cualquier caso, rechazo toda violencia y menos, injustificada.