Cita Iniciado por Alex Fletcher Ver mensaje
El punto fuerte del film es el tratamiento de la perversidad pedofilia que implica este terrorífico concepto, a si, a secas sin vaselina, logrando llevar a un terreno de comedia blanca, que estando en una época pre Lolita, uno no sabe muy bien donde se encuentra el grado de Perversidad en la escala de Mills (personaje, evidentemente que me acabo de inventar), o sea no se muy bien, si la sociedad en esa época se lo tomaba a la ligera, lo que si se, es que en tiempos de ahora, sería clasificada X. Porque el film no para de jugar con mayor o menor intención al cachondeito de dicha perversidad -blanca- en las dos direcciones, porque si bien es cierto, todos piensas que el personaje principal es una menor, ella misma, que no es menor de edad y debido al engaño, tontea con cadetes militares menores de edad. La treta militar de Sedan/París para ligar y conseguir el beso, es magistral, y no duden que la pondré en práctica.
Sin necesidad de entrar en la discusión (que mantenemos por otros canales) sobre si Milland era o no el actor adecuado para el papel (¡ay, Cary, cómo te echo a faltar!) y si su mayor es convincente o no (para mí ni lo uno ni lo otro, y eso que es un actor que, por regla general, me gusta), coincido, como ya dije en mi comentario, en que ese juego con la pedofilia es, de largo, lo más interesante de este film. Me gustaría saber más de cómo se vio este film en su día, en la conservadora Estados Unidos de los 40, a un paso de entrar en guerra a donde irían a luchar (y muchos a morir) esos cadetes que se forman "alegremente" en la academia.

Me da la impresión como si de detectara más ese componente pedófilo ahora (Alex habla de "perversidad") de lo que quizá se detectó en su momento. ¿Nos hemos vuelto más conservadores aún o, al contrario, nos hemos sensibilizado sobre el asunto "en la buena dirección"? Ahora, de forma tremendamente hipócrita, toda relación sexual adolescente (ya no digamos de adulto con adolescente) parece estar bajo sospecha, es anatemizada. Pero en el film de Wilder tenemos un surtido de relaciones "sospechosas" que tienen la culminación en la brevísima secuencia final, cuando caen las máscaras y nos damos cuenta que el mayor ha estado deseando a la "menor" desde el primer momento, cuando le leía cuentos y la acurrucaba para protegerla de la tormenta. Ahí el tándem Wilder/Brackett dio en el clavo. Me encantaría poder recuperar las conversaciones que tendrían los dos guionistas sobre el tema, en especial teniendo en cuenta que Brackett es calificado por Wilder de "republicano ferviente".