Totalmente de acuerdo. Yo pensaba que cada generación valoraría más lo suyo, pero leyéndote me reafirmo en que mis adorados 80 fue una década estupenda para crecer (cinematográficamente hablando). De hecho, fue el ir a ver E.T. con 6 años lo que me convirtió en cinéfilo para el resto de mi vida.![]()