Está claro que no hay que dejarse llevar por el pánico, pero admitamos que es lógico que, como poco, nos asalte la sombra de una duda.
(lo se lo se; pero si no lo digo reviento)
Está claro que no hay que dejarse llevar por el pánico, pero admitamos que es lógico que, como poco, nos asalte la sombra de una duda.
(lo se lo se; pero si no lo digo reviento)