Completamente de acuerdo con lo expuesto por rantamplan. Y especialmente brillante la analogía con el cadáver, el león y los carroñeros.
Es cierto que el negocio les resulta rentable a los piratas. Y, si siguieran editando, obviamente también obtendrían beneficio las majors... pero no les interesa.
En primer lugar porque ahora aspiran a otro tipo de negocio más rentable y simple. En segundo lugar porque éste, el de vender películas en formato físico, lo consideran agotado/amortizado.
No podemos pensar en nuestros términos de rentabilidad: elaboro un producto y obtengo un cierto margen de beneficio. Las grandes multinacionales (y sus accionistas) lo que piensan es "si no obtengo un beneficio neto de X millones al año, no me interesa en absoluto".
Por eso estamos donde estamos. Esto, señores, es el fin de un negocio y, por ende, de un coleccionismo tal y como lo hemos venido disfrutando hasta ahora.
En el futuro próximo la oferta se irá reduciendo cada vez más, y las ediciones tendrán cada vez menos prestaciones y serán más caras. Hay que irse olvidando de cómo llegó a funcionar esto en el pasado. Están quemando (todos, legales y piratas) los últimos cartuchos. Y repito que no es algo sólo de este país, aunque aquí se note antes y en mayor medida. Es un cambio de modelo de negocio: los coleccionistas de dvd y bd ya no interesamos.