Sí, había pensado lo mismo: que quizá obtuvieran permisos de distribución y no de edición... y aprovecharan la oportunidad para exprimir la situación. Sin embargo, seguiría estando ahí la colaboración con quienes se sabe perfectamente qué otros chanchullos se traen entre manos.
En cualquier caso, asombra la abultada cantidad de títulos de diferentes productoras que maneja esta gente. Y también cabe preguntarse si el material que se utiliza para las emisiones televisivas es idéntico (es decir, si procede de los mismos masters) que las ediciones que se comercializan para uso doméstico.
Por otra parte, si pensamos que estas empresas tienen potencial económico como para manejar tal cantidad de derechos de emisión de películas de las principales productoras americanas, quizá no resultaría tan disparatado pensar igualmente que también los adquieren para sus cutre ediciones (salvando, claro, los conocidos casos de "Centauros del desierto", "Mayor Dundee", "El guateque", "Ocho y medio", "Aguilas azules"..., que serían confusiones, y las declaraciones de Twilight Time asegurando que no han cedido los derechos de utilización de sus masters).
Supongo que seguiremos con la incógnita y nadie acabará de explicarnos del todo este inacabable tinglado.