Hombre, porque el archivo digital que suministra la distribuidora ya está de por sí en un formato digital codificado con un algoritmo con pérdida.
Sí tengo que decir, puesto que precisamente me lo acaba de indicar el propio Sven Thomas en un email que he recibido hace escasos minutos, que ese .mov es ProRes, que aunque sigue siendo un formato con pérdida, pues es de mucha calidad.
Lo malo de trabajar con archivos digitales y no con masters, como digo, es que por un lado no puedes realizar tareas de remasterización (como por ejemplo la que ha realizado Arrow para esta misma película), y que obliga a comerse el vídeo tal y como venga de origen, ya tenga un mal encuadre o algo de zoom (como en este caso) y por otro que obviamente el editor del blu-ray va a tener que volver a codificar ese vídeo por segunda vez para la propia autoría del Blu-ray.
De ahí que diga que me parece un error, por parte de la distribuidora (en este caso Lakeshore), utilizar ese formato y sería más eficiente servir el vídeo ya codificado para utilizar directamente en la autoría, evitando esa segunda compresión.
Obviamente, entiendo que es una opción mucho más económica que ahorra el coste de los materiales (masters) y también tener que pagar a otra empresa para codificarlos, ya que ese hardware es muy caro y sólo disponen de ello empresas especializadas.