Nada guapo, las amistades no se pierden. De hecho deberíamos ser todos aún más amigos. Cogernos de las manos y cantar el Kumbawe bajo la luz de la luna.

Por cierto, ¿esta tal Cassandra Peterson se dedicó en su juventud a algún tipo de profesión carnal? Haciendo una búsqueda en Google aparecen interesantes imágenes de ella