Pues si a lo propio, que no solo es editarlo sino también distribuirlo, se le suma el afanarse en distribuir a otros, a más otros que nunca y bien grandes, normal que se acumule el trabajo y haya cosas que posponer, cosas que en otras circunstancias serían prioritarias. Aún hay títulos de los que la major pasará como siempre ha pasado de ellos y tengo esperanzas en que se editen y esperanzas en que se reediten otros en mejores condiciones. Aparte de las sorpresas propias, claro.