Las editoras normalmente no comunican a los comercios que el stock se ha agotado hasta que reciben un pedido que no pueden servir. Y aún así suelen tardar en avisar a la tienda que no se lo sirven porque se han quedado sin existencias. Las tiendas se enteran, pues, cuando la editora o distribuidora es incapaz de servirles las unidades requeridas.

No es la primera vez tampoco que, llegado un periodo de rebajas o una oferta, las editoras hacen llegar a las tiendas listados sin revisar, en los que se incluyen títulos que hace tiempo que se agotaron, con los consiguientes problemas y enfados tanto de los clientes defraudados como de las propias tiendas que han de soportar las quejas ante un problema que no han generado ni pueden resolver.

Creo que en este foro seremos muchísimos los que hemos llegado tarde al stock de una edición que parecía estar disponible.

En cuanto al trato recibido, no pongo en duda tu experiencia pero sí te puedo decir que no coincide en absoluto con la mía.