No perdamos la esperanza (cuando quede en libertad). Aunque a juzgar por el doblaje actualmente disponible, los de Arvi tendrían que ganarse el pan. La peli bien lo vale, que tenía más chispa Carl Reiner a su edad de jubilación que muchas jóvenes promesas de la comedia actual.
"Reivindico la melancolía porque somos lo que fuimos" Carlos del Amor