Seamos honestos. La antigua se ve objetivamente mejor.
La nueva puede tener un repunte de color más vivo (es lo que tiene subir el contraste), más agradable al ojo en un primer vistazo (trampeado), pero en definición la antigua gana por goleada. Sin ser ninguna maravilla ninguna de las dos. Va a resultar que tras 10 años queriendo más definición en las películas, ahora vamos a priorizar un look "estilo HDR" en detrimento de la definición?.... pues no le veo ningún sentido.
Dudas despejadas, paso de la nueva edición de Divisa.