Pues esas capturas, calidad visual aparte, son un auténtico desaguisado. Convierten el scope de los tramposos ("filmascope", 2:35) en un horrible 1:78, por el vil procedimiento de estirar la imagen, llegando Antonio Ozores a medir del orden de 2:20 de alto. Espero de verdad que todo esto sea sólo cuestión de gazapo de especificaciones, porque mandará narices que termine siendo mejor un dvd no anamórfico que un blu-ray, y en este caso, de confirmarse la mutilación, sin duda así será.