Es, literalmente, un mensaje enfocado exclusivamente a mujeres. No a todos los clientes, solo a las mujeres (si es que podemos usar esa palabra hoy en día, claro). Y está hecho de manera totalmente intencionada.
Si el propósito es "vender", me están diciendo, mirándome a los ojos, que no está pensado ni hecho para mi. Como herramienta de marketing me parece cuestionable, como poco, cuando como ya se ha dicho, la inmensa mayoría de compradores de cine doméstico somos varones. Lo que no quita que incluso me haga gracia porque no hace falta caer tan bajo y buscar intencionadamente polémicas estúpidas cuando hablamos de una autora tan conocida, con tal de vender. No cambiará mi intención de comprar (o no comprar).
Pero ya tildar que esto se comente aquí como "gillipollez" significa (para mi) querer blanquear el uso inapropiado de la lengua española, lo cual me puede molestar más que el hecho de ser excluído como público objetivo de una campaña publicitaria.