Pero lo peor es que la culpa no es exclusiva del Ministerio, sino también de nosotros.

Sabemos que las cosas legales cuestan y el precio final se dispararía a los 20€, entonces la gente se queja de que un título de fondo de catálogo valga eso. Sin embargo no veo a nadie quejarse cuando las corsarias editan algo bien, con master fangado a criterion y con un PVP irrisorio de 10€. Egoístamente nos interesa que nos den películas a precios baratos.

Como se ha dicho muchas veces, nosotros mismos las alimentamos.