Esta película fue mi regreso a salas IMAX después de tres años. Y me alegra haber elegido esta.
Una cinta muy divertida, sin pretensiones de ser una obra maestra, que claramente bebe (por no usar palabras más vulgares) de Tarantino en su mejor época. Limón y Mandarina se roban la atención del público, uno se queda deseando una cinta de solo esos dos.
En lo negativo: Lejos de conectarse, se siente como si las tramas se interrumpieran las unas a las otras. No coexisten si no que a ratos parecen verías películas compitiendo por tiempo en pantalla. Le puedes seguir el hilo, pero con esfuerzo.
Todos los personajes tienen ángel, pero de pronto la película no sabe que hacer con tantos y tiene que dejar olvidados a unos (a veces, literalmente guardándolos en el closet) por largos ratos.
Las peleas están muy bien, pero no son particularmente memorables. Los personajes son graciosos, pero no tanto como creen. Hay varios chistes que no aterrizan y quedan en silencio incomodo. Extrañamente, el chiste de Thomas el Tren tiene un ciclo de fastidiar y volver a ser gracioso a lo largo del metraje.
Quizás esto ya es personal, pero no me convenció "El Principe", su personaje de colegiala con facha de inocente debía ser interpretado por una niña de verdad, pero no se atrevieron a eso.
Logan Lerman es un actor al que he defendido en muchas ocasiones, pero esta vez me decepcionó su interpretación (¡De cadáver! Nadamás). No se si solo se notó en pantalla gigante, pero lo vi respirar parpadear un par de veces. No me podía creer que dejaran esas tomas por accidente y hasta pensé que intencionalmente mostraban que estaba fingiendo.
Y ahora "The elephant in the room". Bad Bunny sorprendentemente no esta mal, solo tenía que ser intenso en su papel y eso lo hace bien. Sin embargo, si se nota que forzaron al personaje dentro de la historia solo por la publicidad de tener al cantante en el elenco. Además de un par de sinsentidos. Ok, puedo aceptar que viajara de México a Japón el mismo dia que lo contrataron, pero...
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