El artículo es bastante absurdo, sí. Habría que preguntarle al autor si no le preocupa que los niños que vean a Chis Hemsworth en la película entiendan que no necesitan cultivar su intelecto mientras vayan al gimnasio y estén buenorros. O que las niñas entiendan que cuando tengan empleados deben buscarlos buenorros y tontos para ligar con ellos en lugar de preocuparse por su empresa (olé el feminismo de presentar esas empresarias pensando con los ovarios).
Las posibilidades son enormes.