Oh, ustedes, amantes del fantastique y bendecidos con el don de lenguas. Ustedes, degustadores de platos exquisitos, no deben dejar pasar estas dos delicatessen editados en tiempos por la casa británica Second Run y que, precisamente por ello, encontrarán a un precio más que razonable en los comercios internacionales del ramo.
Valerie a týden divu (Valerie and Her Week of Wonders, 1970), de Jaromil Jires, se basa una novela escrita en 1935 por Vítezslav Nezval, poeta, comunista y fundador del Grupo Suerralista checo. No debe extrañarnos que toda la película sea, por tanto, un sueño: el sueño de una muchacha de trece años que tiene su primera menstruación. Y aquí entramos en el campo de lo simbólico: agua, palomas, telarañas, antorchas, maquinarias mohosas, figuras vestidas de blanco o negro riguroso, dan cuerpo a los deseos y terrores de Valerie en su paso a la edad adulta. El “look” Bilitis no deja de tener su guasa.
Spalovac mrtvol (The Cremator, 1969), del animador Juraj Herz, tira de expresionismo donde Valerie a týden divu ponía surrealismo. Visualmente es una experiencia única. Su argumento es de una ferocidad tan descarnada que acaso se le atragante a los paladares más sensibles. Si entran en su sentido del humor –y la checa es una de las cinematografías más propensas al humor de todos los ex países del ex Este- se darán ustedes un auténtico festín.
Ambas han sido restauradas, respetan el formato original, traen cuadernillos altamente instructivos y vienen en versión original con subtítulos opcionales en inglés.
Valerie a týden divu trae además del trailer, una entrevista con la protagonista, ahora más talludita, y una presentación por el escritor cinematográfico Michael Brooke.
Spalovac mrtvol viene acompañada por una introducción de los hermanos Quay en la que hablan de la epifanía que supuso el descubrimiento de esta película y la influencia que ha tenido en su obra.
Edito de nuevo: Apunta maese Diodati que Spalovac mrtvol pasó por el Festival de Sitges (¿o lo he soñado?). Compruebo que fue en la edición de 1972 y que obtuvo el premio a la mejor fotografía y a la interpretación. No sólo eso, sino que (asombrosamente) fue estrenada en España en 1974 con el título de El incinerador de cadáveres. También Valerie a týden divu tuvo estreno en España, en 1978, como Valeria y la semana de los milagros.