El problema es que no la ponen entre las grandes ni entre las pequeñas. Sencillamente, no la consideran. Pregunta a cualquier cinéfilo que te nombre películas de Renoir, y la mayoría de ellos no te mencionarán esta película. A pesar de la deficiente edición (muy deficiente) disfruté viéndola como un enano. Y me reafirmo en lo que he dicho anteriormente: si no sabes quién la ha dirigido, te parece estar viendo un obra de John Ford.