Es que el tema de 1.66:1 anamórfico se presta a ese juego. Los editores piensan que los compradores huyen de las bandas negras laterales (y es posible que, en términos generales tengan razón) y deciden que por un 6,5% menos de imagen que les des no van a sentirse molestos.
Es difícil ver un 1,66:1 anamórfico sin recorte, o sea con bandas laterales negras, y, para el cine español de aquella época eso es casi una constante.
Nos tendremos que resignar y tragar con la imposición industrial en películas como las que comentas o como Duerme, duerme, mi amor, de Regueiro, otra de las olvidadas... como tantas otras de dicho director.