Si tengo que elegir entre esos dos grupos prefiero de largo a los críticos.
Por supuesto eso no significa que compartiré sus criterios siempre, pero por lo menos "hablamos el mismo idioma". Incluso aunque un crítico vaya contra una peli -o a su favor, da igual para el ejemplo- de la que yo pueda opinar otra cosa, al menos lo justifica con una serie de razonamientos que, en el peor de los casos, te sirve de pista (puesto que es fácil saber de qué pie cojea cada uno de ellos L) ).
El público es absolutamente impredecible y veleta; lo mismo va en masa a ver una peli más que decente, o incluso una obra maestra, que se lanza como loco a degustar la mayor caca del año como si fuera paté a las finas hierbas.