Pudieron salir de ahí. La desgracia del sistema VHS es que es el más malo de los tres, que hubieron. Somete la cinta a una torsión considerable. Si no se tiene la precaución de acabar la reproducción y hacer un rebobinado rápido llevarla al final, para que vuelva la cinta al principio, produce un desgaste prematuro de las cabezas lectoras. Luego hay que vigilar los inevitables desajustes en el mecanismo de enhebrado. Pues si al reproducir la cinta, ésta es "mordida" por el lado del borde inferior. Ahí está la pista de control. Si esta pista se deteriora ya puede tirar a la basura el cartucho. Eso no solo ocurre, sino que ocurrirá inevitablemente. El consejo que doy a todos los que tengan grabaciones valiosas en VHS, que las conviertan cuanto antes a DVD-R o a soporte en archivo divx mucho mejor.
Lo que resulta raro, que no prefiera el Laserdisc al DVD.