En el caso de Vinieron de dentro de... el rechazo está aún más acentuada al estar mezclado de por medio el sexo, que es hoy todavía (aunque parezca mentira) un gran tabú en muchos aspectos. No me cabe duda de que para los infectados, su enfermedad es una
liberación a compartir, mientras que para los no infectados, siempre será una agresión.
Hay un (excelente) episodio de la serie de los años 80 Twilight Zone (el remake de la original) llamado "Camaleón", protagonizado por John Ashton y Terry O'Quinn, que siempre me pareció de los mejores de la serie, y que trata sobre un módulo espacial que regresa a la Tierra trayendo consigo un extraño ser que es capaz de copiar no solo personas y objetos, sino personas a partir del recuerdo de otras personas. El ser es confinado en una cámara cerrada y desde allí va tomando la apariencia del científico al que, de alguna forma, ha absorbido. Cuando finalmente, el ser escapa de la cámara y es perseguido al exterior del recinto por uno de los científicos, la criatura le ofrecerá el irse con ellos y viajar por el Universo viendo sus maravillas, a cambio claro, de ser absorbido por una especie de mente-colmena. Dejo al aire el final por si alguien quiere verlo, pero me pareció una propuesta muy interesante, y muy similar a todos estos temas que estamos viendo.