Hikikomori, a mí si me parece plausible que el marido no vaya a hablar con su esposa. Como bien dice él en el diálogo final entre ambos, has perdido el contacto. No se hablan, no se ven ya (ella está además aislada), pero es que también sabemos que ella ya vivió en otra casa nueve meses antes de ir al instituto y él reconoce no haber ido nunca a dicha casa. Por tanto yo entiendo que toda comunicación está rota.
Respecto a una posible subtrama policial, yo también veo como un acierto, Alex Fletcher, que la policía aparezca lo menos posible. Croe que así se reafirma el elemento familiar de la historia, casi todos los personajes son familia (e incuso el doctor en sus terapias se hace pasar siempre por un familiar) y lo que vemos son las extremas relaciones entre todos ellos. Eso sí, me gustó la escena en que el policía y el padre, asisten con un forense al examen físico del engendro muerto. Casi parece un vídeo de autopsia alienígena, además con un virado de la escena en morado.
Saludos