Lo que ocurre con los ejemplos concretos, Gergo, es que son bastante subjetivos. Se basan en gran medida en gustos personales, en filias y fobias, e incluso convenciones, sobre "qué tono de voz me parece a mí que debería ser el que tuviera esta persona por su apariencia" o "cómo debería hablar" o "cuál tendría que haber sido su entonación al decir tal cosa"... Y las personas son como son, no con otras características diferentes a las suyas.
A tí te puede repatear la voz de Bogart y a otros parecerle consustancial al actor, tenerla completamente asumida como parte de su personalidad. Bogart tiene esa voz permanentemente gangosa y "entre dientes" que es parte de él y de su interpretación, como puede ser la peculiar forma de hablar de López-Vázquez, por poner un ejemplo, o, como ya he mencionado antes, la de José Isbert, o la ligeramente aflautada de Cruise, o la áspera de Pacino que ha ido rompiéndose con el paso de los años como le ocurrió a la de Newman...
Además volvemos otra vez al viejo asunto de que un actor tenga exactamente la misma voz que otros muchos. O que un mismo actor tenga diferentes voces en distintas películas.
Hay a quien no le molesta o no le importa o le gusta o lo que sea. Y me parece muy bien. A los que preferimos la versión original, no nos convence que Bogart tenga la misma voz que John Wayne, y nos resulta extraño que también sea igual que la de Yul Brynner, y que la de Anthony Quinn y Richard Widmark y Sean Connery, y que todos ellos hablen igualito que Charlton Heston y Lee Marvin y Christopher Lee y Burt Lancaster. Y uno se pregunta cómo pueden acabar teniendo el mismo tono y las mismas inflexiones Paul Naschy y Humphrey Bogart.
Pero pueden ser perfectamente manías nuestras.